domingo, 17 de febrero de 2013

Proyectos que merecen la pena

En el post anterior mezclé a dos personajes que tienen poco un común salvo su condición de pioneros en campos muy distintos. Hoy quiero hablar de proyectos o iniciativas que creo merece la pena difundir. No tienen relación entre ellos. Los voy comentando según me vienen a la cabeza.

Fundación RAIS, dedicada a luchar contra la exclusión social. He coincido con ellos dos veces gracias al Día Internacional del Voluntario que organiza Telefónica. En la primera ocasión jugamos un partido de fútbol y en la última nos organizaron una jornada de multiactividades en su centro Carmen Sacristán de Las Tablas con la que disfrutamos mucho y pudimos entender mejor la realidad de las personas a las que ayuda Rais.



Proyecto Positive Generation, de Médicos Sin Fronteras para combatir el SIDA en África, en el que colaboraron músicos importantes como Alejandro Sanz, Juan Luis Guerra o Andrés Calamaro. Por alguna extraña razón que sólo las discográficas entienden, no es posible ya acceder legalmente a los vídeos ni a las canciones completas, algunas de ellas deliciosas. De hecho, en MSF han retirado el link a la web que habían creado. En esta página de RTVE se puede ver más información.

http://www.diarioresponsable.com/images/stories/msf_positive_generation.jpg


Mundo Negro: la revista de los Misioneros Combonianos que mensualmente cuenta el día a día de dichos misioneros y la realidad africana, sin dramatizar ni edulcorar. Su página web también ofrece mucha información interesante sobre ese continente, al que los europeos hemos hecho (y seguimos haciendo) tanto daño.

Mundo Negro 580 Enero 2013

Acabo intencionadamente con una iniciativa que no tiene nada que ver con las anteriores. Se trata de un restaurante que está en Colombia y más concretamente en Chía, a las afueras de Bogotá. Se llama Andrés Carne de Res y es el más famoso del país. Antes de ir pregunté por qué era tan especial y me respondieron que no se puede explicar. Es un tema emocional y hay que vivirlo, me dijeron. Estoy de acuerdo. Desde el punto de vista empresarial, el proyecto es un éxito y muchas veces han preguntado a su creador (Andrés Jaramillo) por qué no lo exporta. Su respuesta es muy simple: no tiene claro que pueda trasladar a otro lugar la magía que se vive allí todas las noches.